En el Perú estas
aeronaves son más conocidas por realizar captura de imágenes y analizar el
estado de salud de los cultivos, pero en estos últimos años también se viene
utilizando en dos tipos de aplicaciones agrícolas (líquidas y sólidas). “Su
contribución y su influencia en la producción agrícola continúa en investigación
y los resultados comienzan a ser bastante alentadores”.
El dron, también conocido como vehículo
aéreo no tripulado (VANT) o aeronave piloteada de forma remota
(RPA), es utilizado principalmente para la captura de imágenes, pero también
se viene desempeñando en las aplicaciones líquidas (de productos
fitosanitarios) y sólidas (de semillas o fertilizantes granulados).
Las primeras pulverizaciones realizadas con un
dron comenzaron en Brasil en el 2017 utilizando herbicidas en los cultivos de
soya de la región conocida como sierra gaúcha, del estado de Rio Grande do Sul y
actualmente existen más de 1,500 drones de pulverización agrícola operando en ese país. En China existen más de 200,000 drones
realizando pulverizaciones y control biológico; y se viene desarrollando trabajos
de investigación al respecto para mejorar los métodos de aplicación tradicional
(manual y mecánico) que muchas veces producen una alta tasa de residuos
químicos. En el caso del Perú, la importación de este tipo de aeronaves está
enfocada para la captura de imágenes, mientras que las de aplicación agrícola han
comenzado a surgir. Solo para citar un ejemplo, en el 2021 se han importado
35 drones de pulverización agrícola (Adex Data Trade).
Varios autores coinciden que los drones deben clasificarse de acuerdo con las demandas de los usuarios en el sector de la investigación científica, civil o militar y por esa razón tomaron como referencia su peso y su capacidad de vuelo. Por ejemplo, Brooke-Holland (2012) propusieron la siguiente clasificación de acuerdo con el peso del dron.
Tipo |
Rango de peso |
|
Classe I (a) |
Nano drones |
P < 200 g |
Classe I (b) |
Micro drones |
200 g < P <
2 kg |
Classe I (c) |
Mini drones |
2 kg < P <
20 kg |
Classe I (d) |
Drones pequenos |
20 kg < P <
150 kg |
Classe II |
Drones tácticos |
150 kg < P <
600 kg |
Classe III |
Drones de ataque |
P > 600 kg |
En Brasil y Argentina toman ese mismo criterio
de acuerdo con sus normas legales de sus asociaciones aeronáuticas. Por citar
un ejemplo, en Brasil los drones se clasifican en clase 1, donde
el peso es mayor a 150 kg; clase 2, cuyo peso
se encuentra entre 25 y 150 kg, y clase 3, donde
el peso es menor a 25 kg. La clasificación más generalizada que existe de los
drones se basa en su arquitectura y en este caso tenemos los
drones con ala fija y los
drones con rotores. Estos últimos dependiendo del número de rotores,
pueden ser: cuadrocópteros, hexacópteros, octacópteros o decacópteros, siendo los más comunes en las aplicaciones
agrícolas. Sus principales componentes involucran a las
hélices, los rotores, las baterías, los controladores de velocidad y de vuelo,
los sensores, algunos accesorios (cámaras, radar, válvulas o tanques de
pulverización) y una estructura de soporte.
El dron en las aplicaciones agrícolas
Existen dos tipos de drones de aplicación agrícola, aquel que realiza
aplicaciones de productos sólidos como semillas, productos biológicos o
fertilizantes granulados y aquel que realiza aplicaciones líquidas, es decir,
que realiza la aplicación de productos fitosanitarios y también pueden ser
conocidos como el dron de pulverización agrícola.
Los beneficios del dron en las pulverizaciones agrícolas se vienen dando
en el incremento del desempeño operacional de la aplicación en sí, en el incremento
de la precisión, en la nula exposición del operador con el producto químico y en
la realización de un mejor control de las plagas y enfermedades, que permiten
finalmente MEJORAR la productividad en el campo, OTORGAR seguridad
alimentaria y PROTEGER la salud del agricultor.
Las ventajas del dron están en que puede realizas aplicaciones en áreas con
difícil acceso, en áreas con pendientes muy pronunciadas y con obstáculos y en
áreas próximas a lugares de preservación; asimismo, se adapta muy bien a
cualquier tamaño de área e indirectamente evita que se produzcan daños por la
compactación del suelo que muchas veces producen los conjuntos pulverizadores
mal dimensionados.
En resumen, el dron de pulverización agrícola ha dado un salto enorme en
la agricultura, pero aún existe trabajo por hacer en el campo de la
investigación y poder saber más sobre el desempeño de estos singulares
vehículos aéreos. En nuestro próximo artículo abordaremos sobre la calibración
y regulación de los drones de pulverización agrícola.
Tecnología de punta: Los drones para pulverizar cultivos se han convertido en una herramienta eficaz y práctica, pueden sobrevolar extensas áreas con precisión, incrementan la eficiencia y productividad, ayuda a reducir los costos de operatividad y aumenta la rentabilidad de los cultivos. En la foto, un dron de pulverización agrícola o dron hexacóptero cuya capacidad del tanque es de 16 litros. Fuente: El autor, 2021.
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El autor Ing. Agríc. MSc. Rubén D. Collantes Veliz, docente en la Universidad
Nacional Agraria La Molina.